Tu que llegaste por casualidad

Mañana os explicare el bautizo y el fin de semana con la madre y la hermana de Chiriko, que al final nos hizo sol :)

Pero el tema es que como 20 de cada mes, hoy hace un mes más que estoy con Chiriko.

Y no sé, no sabría como decirte, tanto al lector como a él mismo, lo inmensamente feliz que me hace día a día.

Es difícil explicar como encuentro la calma en sus ojos azules, la tranquilidad que tengo cuando simplemente apoya su cabecita rubia en mi pecho y dejamos pasar el tiempo.

Cuando dormimos juntos, normalmente me meto yo antes en la cama, y mientras el se quita las lentillas y se arregla para dormir, espero a que venga, lucho contra el sueño porque cuando me abraza y me dice que me quiere, justo en ese momento, sé que soy inmensamente afortunado de tenerlo, y en ese momento me olvido de todo y es como si nunca pudiera pasar nada malo…

Algo así, si.